Tener voz es una cosa, pero saber usarla es otra muy distinta. Pues, en realidad, la voz es como un músculo: si sabes cómo usarla, haces magia. Esta no solo nos sirve para hablar; es un instrumento chulísimo y único que tenemos para comunicarnos y transmitir lo que sentimos. Pero, siendo sinceros, mucha gente anda por ahí cantando "a lo loco", a veces incluso desgañitándose, sin realmente saber lo que su garganta puede hacer e incluso amenazando con romper los tímpanos y hasta los vidrios cercanos.
¿Alguna vez te has preguntado si lo tuyo es ponerle sentimiento a las notas graves o si tienes el potencial para soltar unos agudos potentes que ponen la piel de gallina? ¿O quizás quieres saber si llegas a esas notas altas de tus artistas favoritos sin desafinar ni sonar como un chivo?
Para eso hicimos esta prueba vocal online, para que descubras cuáles son las notas en las que tu voz se siente cómoda y natural, y tengas una herramienta rápida que te permita conocer tu límite y tu potencial. Responde las preguntas que te dejamos aquí abajo para que sepas "klk" con tu voz... A ver si descubres ese talento que tienes escondido. ¡Prepárate, que te vas a sorprender!
Quiz
Quiz :Ya tengo el resultado… ¿Y ahora qué?
¡Felicidades! Ya hiciste el test y sabes por dónde va tu rango vocal. Pero no te quedes ahí; ahora toca usar esa información a tu favor. Chequea estas recomendaciones para que le saques provecho a tu voz:
1. Elige las canciones que te van: no te pongas a inventar cantando cosas que no te lucen. Si el test dice que eres de voz grave, busca temas que tengan peso y cuerpo. Si te salen los agudos, vete por ahí. Cantar lo que te queda bien no solo se oye mejor, sino que tú te lo gozas más porque no estás pasando trabajo.
2. Cógelo suave (ajusta expectativas y NO te fuerces): saber tu límite es vital para no "guayarte". A veces queremos soltar notas imposibles y lo que hacemos es lastimarnos las cuerdas vocales. Si no le llegas a una nota, no la fuerces hoy. Quédate en tu zona segura y ve trabajando desde ahí. Forzar la garganta para alcanzar notas que aún no tienes puede hacerte daño. Mejor conoce tus límites, evita dañar tu voz y enfócate en pulir lo que ya te sale bien.
3. Ponte para lo tuyo (y arranca el plan de entrenamiento): con los resultados en mano, ya puedes entrenar con sentido. Si tienes un coach vocal o profesor de canto, enséñale lo que te salió en el test. Así dejan de adivinar y empiezan a trabajar directo en lo que te hace falta, armando una rutina de ejercicios a tu medida, atacando tus puntos débiles y potenciando los fuertes.
Nítido, ya sabes dónde estás, pero quizá te preguntas...

¿Cómo puedo subir de nivel y ampliar el rango?
Saber tu tipo de voz es solo el inicio. Si de verdad quieres mejorar y ampliar tu registro "chin a chin" (poco a poco), aquí tienes unos trucos que no fallan:
- Calienta los motores: nunca te pongas a cantar en frío. Haz ejercicios de calentamiento, subiendo y bajando escalas suavemente. Esto prepara las cuerdas vocales y te evita lesiones.
- Aprende a respirar: esto es el ABC. Tienes que respirar con el diafragma (la barriga), no con el pecho. Eso es lo que te da el control y el aguante para mantener las notas.
- Despacito y con buena letra: ampliar el rango toma tiempo. No quieras llegar a los extremos de un día para otro. Trata de ganar una o dos notas nuevas poco a poco, sin forzar la máquina.
- Hidratación ante todo: bebe mucha agua, preferiblemente no muy fría ni demasiado caliente, para que puedas mantener la garganta húmeda y sin estrés por la temperatura. Bájale un poco al café y al alcohol si vas a cantar y trata de descansar la voz. ¡Nada de estar gritando en sitios ruidosos!
- Busca un guía: un buen profesor de canto vale oro y logra maravillas. Gracias a su experiencia, te va a identificar y corregir las mañas, te dará técnicas nuevas y te dirá si lo estás haciendo bien o mal.
- Usa la tecnología: hay un montón de herramientas a tu alcance. ¡Úsalas a tu favor! Bájate una app de afinación o de entrenamiento auditivo y descubre nuevas maneras de practicar en la casa o en el carro.
- Oye a los que saben: escucha a tus cantantes favoritos, pero analízalos. Fíjate cómo respiran y cómo atacan las notas. No es para copiarlos, es para aprender los trucos y adaptarlos a tu estilo.
Este camino para conocer y mejorar tu voz es emocionante. Con lo que aprendiste en el test, ya tienes una buena base. Sé constante, cuida tu instrumento y, sobre todo, ¡gózatelo!
Eso sí, recuerda ser constante, disciplinar tu práctica y cuidar tu instrumento… ¡A cantar se ha dicho!








